El Ayuntamiento de Vélez-Málaga continúa avanzando en su hoja de ruta para dotar al municipio de infraestructuras y equipamientos que mejoren la comunicación y el tránsito de vehículos entre sus distintos núcleos. En este contexto, uno de los proyectos clave es la reurbanización del Camino de Torrox, un compromiso del alcalde, Jesús Lupiáñez, sobre el que se da ahora un paso decisivo. Concretamente, el equipo de Gobierno ha completado la obtención del suelo del sistema general VM-24, un hito imprescindible para poder ejecutar la tercera y última fase de este importante eje viario.
La Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto para la obtención de los terrenos necesarios para desarrollar esta tercera fase del Camino de Torrox. La propuesta contemplaba la incorporación a titularidad pública de seis fincas de propiedad privada, un paso imprescindible para completar el trazado. En este sentido, los distintos propietarios firmaron los correspondientes convenios, procediéndose al acta de ocupación del suelo y al abono del justiprecio conforme al valor catastral, por un importe total de 382.722 euros.
Una vez culminados los trámites administrativos, la Junta de Compensación acordó el futuro inicio de las obras, que contarán con un presupuesto que se solicitará en el primer trimestre de 2026 para su posterior adjudicación en el primer semestre del mismo año. Estos trabajos permitirán completar el último tramo del Camino de Torrox, de modo que “todo el proyecto quedaría resuelto a falta de que el Gobierno central ejecute la remodelación del semienlace de Caleta de Vélez”, ha explicado el alcalde, Jesús Lupiáñez, quien ha instado en reiteradas ocasiones al Ejecutivo a agilizar los trámites.
En este sentido, el alcalde, Jesús Lupiáñez, ha recordado que, tras su insistencia, el proyecto de trazado del semienlace se encuentra en fase de aprobación provisional, restando aún aspectos técnicos, plazos y documentación por concretar. De este modo, tras lograr la conformidad de los seis propietarios afectados, el Ayuntamiento culmina sus deberes, consigue un desbloqueo histórico y deja completamente preparado el desarrollo del Camino de Torrox, a la espera de que se complete una demanda que se arrastra desde hace más de veinte años. “El año 2026 será vital para el desarrollo de Vélez-Málaga”, ha añadido el regidor, en referencia a la prevista adjudicación de las obras y a la finalización de la segunda fase del eje viario.
La reurbanización del Camino de Torrox, eje vertebrador entre Vélez-Málaga y Caleta
La reurbanización del Camino de Torrox es un compromiso del actual equipo de Gobierno con el objetivo de transformar este eje estratégico en una vía moderna, segura y eficiente que mejore la movilidad y la comunicación entre Vélez-Málaga, Caleta de Vélez y la A-7. Para facilitar su ejecución, el proyecto se estructuró en varias fases. A día de hoy, la actuación ha superado su punto de inflexión: la primera fase ya se ha completado y actualmente se ejecuta la segunda. “Los tiempos son adecuados y pronto se resolverá esta actuación”, ha señalado el concejal de Urbanismo, Celestino Rivas, quien ha subrayado que “ya se ha mejorado de forma notable la conexión con Torre del Mar y la ordenación urbana de su entorno”.
La primera fase supuso el inicio de la transformación integral del vial, con actuaciones centradas en la mejora del trazado, la ampliación de la calzada y la renovación completa de las infraestructuras. En este tramo se ejecutaron nuevas redes de saneamiento, abastecimiento y pluviales, se modernizó la iluminación pública y se incorporaron acerados más accesibles, reforzando la seguridad tanto para vehículos como para peatones. Esta intervención resolvió deficiencias históricas y sentó las bases del desarrollo posterior del eje, con una inversión superior a 1,8 millones de euros, de los que 800.000 euros fueron aportados por la Diputación de Málaga y el resto por el Ayuntamiento.
Posteriormente, la segunda fase está dando continuidad al proyecto mediante la urbanización de un nuevo tramo, profundizando en la mejora de la movilidad y la integración urbana del Camino de Torrox. En esta etapa se está haciendo el desdoblamiento para incorporar el doble sentido, un carril bici, reforzar la seguridad y avanzar en la conexión con ámbitos estratégicos del municipio, facilitando el acceso a zonas residenciales y a futuras áreas de desarrollo. Tanto la primera como la segunda fase han supuesto “un importante esfuerzo económico que demuestra el compromiso de este equipo de Gobierno con las necesidades reales de los vecinos”, ha destacado Rivas.
De forma paralela, el Ayuntamiento ha trabajado en actuaciones complementarias y proyectos asociados, como la planificación de nuevos enlaces viarios, la coordinación con otras administraciones y la obtención progresiva de suelos necesarios para garantizar la continuidad del Camino de Torrox hasta su conexión final con la red estatal. En este marco, la Junta de Gobierno Local aprobó además la urbanización de más de 250.000 metros cuadrados de suelo, lo que permitirá en el futuro la construcción de hasta 509 viviendas, y la urbanización del suelo industrial del SUP VM-18, conforme al planeamiento vigente.
Con las dos primeras fases ya ejecutadas y la tercera desbloqueada, el Camino de Torrox se consolida como una infraestructura clave para el presente y el futuro del municipio, mejorando la movilidad, favoreciendo un desarrollo urbanístico ordenado y reforzando la conexión entre los distintos núcleos de población.