Garrido Moraga ensalza el ajobacalao en un pregón cargado de referencias literarias, históricas y religiosas

El catedrático y director de la Fundación María Zambrano, Antonio Garrido Moraga, ha asegurado que el ajobacalao es la naturaleza aplicada a la comida, un alimento “franciscano” genuinamente veleño que necesita de “pasaporte diplomático” para que se conozca por todo el mundo.

El catedrático y director de la Fundación María Zambrano de Vélez-Málaga, Antonio Garrido Moraga, ha ensalzado hoy el ajobacalao y la cocina de Cuaresma en un pregón cargado de referencias literarias, históricas y religiosas, que se celebrado en el Museo de Semana Santa de Vélez, un acto que ha tenido como padrino al insigne ex futbolista veleño Fernando Ruiz Hierro, que no ha podido acudir al acto por motivos profesionales.
En presencia del alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla, la diputada de Desarrollo Económico y Rural, Leonor García-Agua, el presidente de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa, José Antonio Ferrer Moreno, y otros diputados nacionales, parlamentarios andaluces, concejales del Ayuntamiento de la capital de la Costa del Sol Axarquía, ciudadanos y cofrades, Garrido Moraga ha comenzado su discurso asegurando que el ajobacalao es bueno “para el cuerpo y para el alma”, un alimento “humilde y franciscano” genuinamente veleño que necesita ahora “pasaporte diplomático” para que se conozca por todo el mundo. “Lo ideal es sentarse ahí fuera, ahora que llega la primavera, con un buen vino de Málaga y un plato de ajobacalao, porque eso es el ágora, lo mediterráneo, la democracia. Hemos venido al mundo a ser felices, a disfrutar”, ha puntualizado Moraga, quien ha explicado que el bacalao, “el abadejo de Cervantes, es el rey de la Cuaresma, que derrotó a Don Carnal como muy bien nos cuenta el Arcipreste de Hita en su ‘Libro del buen amor”.
Moraga ha señalado que el ajobacalao recoge lo mejor de los productos naturales, “es la naturaleza aplicada a la comida”, el ajobacalao es bacalao al que la sabiduría popular le ha puesto “ajo y pimentón, y lo ha convertido en un exquisito paté al que sólo le falta el impulso promocional, el impulso de un Ferrá Adriá, tan necesario para que pueda servirse en las grandes mesas”.
“Un paraíso cervantino y zambraniano”
Entre referencias a los gustos culinarios de Carlos V, al ingenio de los cartujos para comer carne durante la Cuaresma, a la flagelación de los disciplinantes del amor, al libro sobre la cocina de Cuaresma de Álvaro Cunqueiro y a un verso de Alfonso Canales (Cuando la primavera nos toma por asalto...), Garrido Moraga ha mostrado su “amor” por Vélez-Málaga, “por este paraíso cervantino y zambraniano” y por sus cofradías. “Toda persona decente debe ser cofrade”, ha manifestado con humor.
Por su parte, el alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla, ha destacado la importancia que supone para la ciudad la Semana Santa, “que no sólo es patrimonio y arte, sino también es economía, empleo, cultura y turismo”, a la vez que ha abogado por sacar al ajobacalao “de su estacionalidad, como está haciendo la empresa ‘Lujo del Paladar’, que ha comenzado ahora a comercializar este producto tradicional veleño y que tendrá todo el apoyo de nuestro Gobierno”, ha señalado el máximo mandatario de la capital de la Costa del Sol Axarquía, que ha felicitado a Fernando Ruiz Hierro “por estar dispuesto a apoyar todas las iniciativas importantes que se organizan desde el Ayuntamiento”, así como a la Diputación Provincial de Málaga, “por su excelente idea ‘Sabor a Málaga”. El primer edil veleño ha terminado su intervención leyendo unos versos del poeta Salvador Gutiérrez sobre el ajobacalao.
Premiados
Tras el pregón, se ha procedido a entregar los premios del I Concurso Ajobacalao, donde el Mesón-Tapas Jordi ha conseguido el primer premio al mejor ajobacalao. La Archicofradía del Pobre y la Esperanza ha obtenido el premio a la receta tradicional con “Potaje de Semana Santa”, mientras que el primer premio a la receta mejor restaurante ha sido para el Bar Cofrade por su ‘Bacalao cofrade’. Por último, el premio a la receta innovadora ha sido para la Escuela de Hostelería del Castillo del Marqués, por su torrija con crema de limón caramelizada. A los ganadores se les ha obsequiado con una escultura en forma de mortero, obra de José Luis Martín, y 200 euros, a excepción del premio al mejor ajobacalao, que tenía una dotación de 300 euros.
Por último, todos los asistentes han podido disfrutar de las decenas de platos de ajobacalao y de cocina de Cuaresma que se han presentado al concurso. Estas jornadas de promoción seguirán hasta el 31 de marzo, en más de una veintena de bares y restaurantes de Vélez-Málaga y Torre del Mar, que tendrán en sus cartas platos típicos de la Cuaresma veleña.

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